Arthur Schopenhauer a través de sus frases

Analizamos a Arthur Schopenhauer a través de sus frases, que, a la fecha, son consideradas como puntos de reflexión, ya que reflejan una visión distinta sobre voluntad irracional, la felicidad y el sufrimiento humano.

Las frases del filósofo Arthur Schopenhauer concentran la esencia de su filosofía, abordando temas como el amor, la muerte, la libertad, la soledad y el arte. 

Frases pesimistas para reflexionar de Arthur Schopenhauer

1. “La vida es un péndulo que oscila entre el dolor y el aburrimiento”

Obra

El mundo como voluntad y representación (1819), Libro IV.

Reflexión

Schopenhauer sostiene que la Voluntad (fuerza irracional que impulsa la existencia) nos condena a un ciclo de deseo insatisfecho (dolor) o saciedad vacía (aburrimiento). 

El filósofo ve en este péndulo la causa de la insatisfacción universal y propone el arte y la contemplación estética como escapes que ayudan a liberarse de esa oscilación.

Esta idea refleja su influencia del budismo (dukkha) y anticipa el existencialismo del siglo XX.

2. “El hombre ha hecho de la tierra un infierno para los animales”

Obra

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Sobre el fundamento de la moral (1840), §19.

Reflexión

Este aforismo denuncia la brutal explotación animal como consecuencia de la voluntad que impulsa al ser humano a satisfacer sus deseos, sin atender al sufrimiento que causa. Al describir la Tierra como “infierno” para los animales, subraya la injusticia ética de ignorar que su voluntad es ontológicamente idéntica a la nuestra.

Con esto, defiende la compasión como base ética, influido por el ahimsa (no violencia) del hinduismo. Es considerado pionero de la ética animal moderna.

3. “La soledad es la suerte de todos los espíritus excelentes.”

Obra

Parerga y Paralipómena, “Sobre la sabiduría de la vida”.

Reflexión

La capacidad crítica y creativa separa al «espíritu excelente» de la multitud, que vive atrapada en la repetición de deseos banales, señala el filósofo. 

La soledad no es mero aislamiento, sino clima necesario para la contemplación estética y la investigación filosófica. En ella, el individuo puede observar el péndulo de su voluntad sin interferencias externas, acercándose a la comprensión de la cosa-en-sí.

4. “La riqueza no consiste en tener grandes posesiones, sino en tener pocas necesidades.”

Obra

Parerga y Paralipómena, “Sobre la sabiduría de la vida”.

Reflexión

Schopenhauer rescata una forma práctica de ascetismo: la moderación de deseos libera al sujeto de la tensión perpetua de la voluntad. Redefine la abundancia no como acumulación de bienes, sino como maestría de uno mismo. Esta perspectiva anticipa corrientes minimalistas y eco-filosóficas que valoran la sobriedad como vía para el bienestar auténtico.

5. “La música es la magia más cercana al mundo soprasecretivo de la voluntad.”

Obra

El mundo como voluntad y representación, Libro III.

Reflexión

A diferencia de las artes plásticas o la literatura, que representan Ideas platónicas, la música comunica directamente la voluntad: su cadencia, sus tensiones y resoluciones expresan la dinámica interna de la voluntad ciega. Por ello, la música puede conmovernos sin necesidad de contenidos discursivos, actuando como el lenguaje primordial de la vida misma.

6. “La compasión es la base de toda moral.”

Obra

Sobre el fundamento de la moral (1840), §16.

Reflexión

Schopenhauer sitúa la raíz de lo moral en la Einfühlung (empatía) hacia el otro. Al reconocernos en el conocimiento del sufrimiento ajeno, trascendemos el egoísmo natural de la voluntad. Así, la compasión no es un ornamento ético, sino la manifestación práctica de la unidad esencial de todas las voluntades, fuente de deberes genuinos y no meros imperativos racionales.

7. “El hombre distingue el tiempo en pasado, presente y futuro; sólo la voluntad vive en un continuo presente.”

Obra

El mundo como voluntad y representación

Reflexión

Para Schopenhauer, el sujeto pensado ya introduce el tiempo como forma de la sensibilidad, pero la voluntad, como impulso atemporal, no se somete a esa estructura: su urgencia es siempre ahora. De aquí deriva la urgencia de trascender la temporalidad mediante contemplación estética o renuncia.

8. “El mundo es mi representación.”

Obra

El mundo como voluntad y representación

Reflexión

Esta afirmación sitúa al sujeto como coautor de la realidad fenoménica. Sin embargo, Schopenhauer identifica la cosa-en-sí con la voluntad: la representación (el mundo fenoménico) es la manifestación objetiva de esa fuerza monolítica. 

9. “El hombre se acostumbra a todo, incluso a la felicidad.”

Obra

Parerga y Paralipómena

Reflexión

La voluntad -al no descansar nunca- adapta su nivel de satisfacción al nuevo estado, de modo que la felicidad se convierte en norma y ya no se experimenta como tal. La única salida que sugiere Schopenhauer es la renuncia voluntaria a los deseos: una forma de ascetismo que frena la rueda del deseo.

10. “La mayoría de los hombres vive en un silencio doloroso, inquebrantable, porque para ellos el querer es sufrir.”

Obra

El mundo como voluntad y representación

Reflexión

Según Schopenhauer, la voluntad encarna un impulso constante e insaciable cuya realización solo engendra nuevas carencias. La conciencia de este estado genera un sufrimiento íntimo que la sociedad disimula con distracciones. El reto filosófico es reconocer ese silencio doloroso para orientarse hacia la compasión y, eventualmente, la liberación ascética.

Arthur Schopenhauer tuvo un pensamiento revolucionario sobre la voluntad.

El pensamiento de Schopenhauer en dos pasos

Schopenhauer parte de la idea de que el mundo que percibimos no es la realidad tal como es, sino una representación que se forma en nuestra mente. Esta idea la retoma de Kant. 

En ese sentido, señala que el mundo tiene dos caras:

Lo que vemos (“Representación”): Todo lo que percibimos (árboles, personas, ciudades) es como una película que nuestro cerebro proyecta.

Lo que realmente es (“Voluntad”): La realidad (como gravedad o instintos) que nos hace desear, sufrir y repetir ciclos sin sentido.

La eterna insatisfacción:

Para el pensador, como la voluntad nunca se sacia, el ser humano vive en constante insatisfacción. Cuando deseamos algo y lo conseguimos, pronto queremos otra cosa. Por eso, la vida es sufrimiento: porque siempre estamos queriendo y casi nunca estamos plenamente satisfechos.

Pesimismo filosófico y Eudemonología

Según Arthur Schopenhauer, la Eudemonología es la doctrina o el estudio sobre cómo alcanzar la felicidad o una vida buena, aunque desde su perspectiva realista y pesimista.

Este término aparece especialmente en su obra “Aforismos sobre la sabiduría de la vida”, donde Schopenhauer intenta ofrecer consejos prácticos para vivir mejor, a pesar de considerar que la felicidad plena es inalcanzable.

¿Qué significa Eudemonología?

Etimológicamente, viene del griego:

“eu” = bueno,

“daimon” = espíritu o genio,

“logos” = tratado o estudio.

Por tanto, es el “tratado sobre el buen espíritu” o “cómo vivir bien”. Sin embargo, Schopenhauer resignifica el término: no es una receta para ser feliz en sentido pleno, sino una guía para minimizar el sufrimiento y aprovechar los pocos momentos de bienestar que la vida ofrece.

Schopenhauer propone que la Eudemonología es la manera para ser felices.

¿Qué propone Schopenhauer en su Eudemonología?

En lugar de dar fórmulas mágicas para la felicidad, ofrece una serie de reflexiones prácticas, basadas en su visión filosófica del mundo. Algunas ideas clave son:

El carácter individual importa mucho

Cada persona nace con una determinada forma de ser, y eso influye más en su posibilidad de vivir bien que cualquier riqueza externa.

“Lo que uno es por dentro cuenta más que lo que uno tiene o representa.”

La felicidad está en evitar el dolor, no en acumular placeres

El hecho de desear, genera sufrimiento, la verdadera sabiduría es desear poco, vivir con sencillez y moderar nuestras expectativas.

Evitar la comparación social

Compararnos con otros solo genera envidia y frustración. La vida buena es una vida propia, no una competencia.

La importancia de la salud, el tiempo y la tranquilidad

Schopenhauer valora la salud física, el tiempo libre para la contemplación y la paz interior más que el dinero o el reconocimiento social.

Conclusión 

La mayor aportación de Schopenhauer a la filosofía fue su metafísica de la voluntad, una teoría revolucionaria que reinterpretó radicalmente la naturaleza de la realidad y la condición humana. Su obra “El mundo como voluntad y representación” inspiraría a escritores, músicos y filósofos posteriores como Nietzsche, Freud, Wagner y Thomas Mann. 

Murió en 1860 en Fráncfort, dejando como legado una filosofía que sigue cuestionando el sentido de nuestra voluntad de vivir.

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